El nearshoring se ha consolidado como una estrategia clave en la reconfiguración de las cadenas globales de valor, posicionando a México como destino preferente para la relocalización de procesos productivos, especialmente en el marco del T-MEC. Esta investigación analiza sus implicaciones económicas, evaluando el potencial para impulsar un crecimiento sostenido y los retos ambientales y sociales que enfrenta. A través de revisión documental, datos económicos y marcos normativos, se examinan sectores estratégicos, condiciones estructurales y disposiciones del tratado vinculadas al desarrollo sustentable. Los resultados muestran que, aunque el nearshoring representa una oportunidad para dinamizar la economía, también implica riesgos relacionados con la presión sobre recursos naturales, la desigualdad regional y el cumplimiento de estándares ambientales. Se plantean recomendaciones para integrar criterios de sostenibilidad en políticas públicas, estrategias empresariales y gobernanza industrial. Se concluye que articular crecimiento y sostenibilidad será crucial para consolidar al nearshoring como motor de desarrollo en México.